En una época en que los talonarios de recibos, facturas, impresos en papel, ceden espacio a los documentos digitales, no tendría sentido sacrificar tiempo y dinero para ir a estampar una firma.

Con una firma digital “basta y sobra” para dar a un documento el carácter legal que se necesita para adquirir un compromiso o para exigir su cumplimiento.

Y, sin embargo, una firma digital no es más que un conjunto de caracteres (letras, números y símbolos) que se añaden al final de un documento, para darle la misma validez que tiene una firma manuscrita.

Claro que ésta debe ser otorgada por una entidad autorizada, para que adquiera validez legal y, para obtener la certificación, entra en juego una serie de complejas operaciones matemáticas, para que nadie pueda copiarla o adulterarla.

Una firma digital tiene numerosas ventajas:

En principio, por tratarse de “algoritmos”, “firmas criptográficas” y otros conceptos característicos de la informática, la creación y utilización de la firma digital le puede parecer algo imposible de entender, cuando no se está familiarizado con los temas digitales.

Es lógico. Tratar de entender cómo funciona un “software” de cualquier índole, no está al alcance de todos. Pero, en la práctica, crear la firma digital es un proceso es sencillo. Un experto en el manejo del programa lo guía, paso a paso, para que usted pueda crear y dar validez a la firma (que solo  usted conoce).

En Coopealianza le ofrecemos el servicio de firma digital. Visítenos en nuestra oficina de Villa Ligia, Pérez Zeledón, con un horario de atención de lunes a viernes, de 8:00 am a 4:30 pm, y sábados de 8:00 am a 12:00 md, y nosotros le ayudamos a modernizarse.